Mi gente de La fe de Cuto, luego de dos ediciones especiales con Carlos orejuela, esta semana les traemos un programa de colección muy divertido junto a los hermanos Leao y Jahir Butrón, una dupla que ha dedicado toda su vida al fútbol. Harto aguadito, como tanto les gusta.

Mira también:

En la divertida charla los hermanos Butrón nos cuentan detalles de cómo fue su infancia en Mirones, donde tenían como vecino al ‘Mudo’ Rodríguez. Además, revelan cómo surgió la oportunidad de que empezaran a practicar el deporte de la pelotita y cómo -posteriormente- se sumaron a grandes equipos de la liga peruana.

Finalmente, Leao Butrón hace catarsis y confiesa que le dolió no haber sido convocado por Ricardo Gareca en el equipo que disputó la Copa mundial del 2018. Arrancamos, mi gente, no se olviden que la fe es lo más lindo de la vida.

¿De qué barrio son?

Leao: Mirones

Jahir: Ahí llegamos chicos, de siete años más o menos. Cachín vivía al frente de mi casa. Flavio también, vivía más arriba en Monsefú, por el Amauta, pero estudiaba en el Hipólito, como nosotros. ¿Tú crees que nosotros somos pituquitos? No...

L: Teníamos una media nomás y tres calzoncillos. Cuidabas como oro las medias, igual las zapatillas.

Leao y Jahir Butrón se confiesan en 'La fe de Cuto', en una edición especial.
Leao y Jahir Butrón se confiesan en 'La fe de Cuto', en una edición especial.

¿Cómo fue su infancia en el barrio?

J: Tú salías y encontrabas chicos jugando cualquier cosa, fulbito, lingo, mata gente. Era una unidad vecinal, todos se conocían y jugabas con cualquiera.

L: De ahí también es el ‘Mudo’ Rodríguez, vivía arriba de nosotros. Jugaba en el parque todos los días, lo dejaban todos los días, nosotros solo sábado y domingo. Una vez el ‘Mudo’ se cayó del quinto piso.

J: Yo tenía mi cuarto solo y escucho a alguien gritar. Cayó en unas ramas y eso amortiguó.

L: No le pasó nada, ya después pura lesión jajaja.

Leao, dicen que una vez en tu barrio te pegaron y llamaste a tu hermano

L: Este siempre ha sido bronquero. A mí me gusta solucionar los problemas. No me gustaba pelear, pero a este siempre le ha gustado. Yo no me acuerdo por qué me hicieron la bronca y un pata me pegó. Voy a mi casa llorando y regresé con mi hermano. Estaban jugando frontón y nos ven y dicen ‘ahí viene el otro idiota’, lo tuve que agarrar.

J: No me acordaba de eso que dijeron pero sí me acuerdo que antes de eso él entra y yo estaba en la casa, mi papá me llamó para decirme que le habían pegado. Mi papá abrió la ventaba y me dijo quién había sido. Se me apagó la tele, bajé y...

¿Quién empieza a jugar primer fútbol?

L: Mi hermano. Siempre ha jugado bien. Yo soy arquero porque no me escogían. Mi hermano va primero a Cristal.

J: Sí, pero fue una casualidad. Teníamos unos primos de cariño que vivían cerca de la casa y estábamos jugando un día en su casa, en la calle, yo tenía 12 años y mi primo de un momento a otro dice ‘ya me voy, voy a entrenar’. Entrenaba fútbol y me dijo para ir. Yo a los 12 años ya tenía esta talla pero era flaquito. Sí me gustaba jugar, pero no era fanático, no conocía mucho. En Cristal estaban en la cancha dos y yo estaba mirando. Pasó Gallardo, yo no lo conocía hasta que me dijo ‘oye, grandazo, qué edad tienes’. Se sorprendió cuando le dije que tenía 12 años. Me dijo que al día siguiente lleve mi partida y dos fotos. Llegué y me puso a jugar adelante, me llevaba a todos. Me puso de volante y luego defensa. A la semana me preguntó si no tenía hermanos y llevé a Leao.

L: Me iba porque se estaba formando la categoría 77, no había esa categoría. Fui de arquero. Jugaba fulbito como arquero, era avezado. Me decían ‘loco’ antes, porque me tiraba al cemento.

Leao y Jahir Butrón se confiesan en 'La fe de Cuto', en una edición especial.
Leao y Jahir Butrón se confiesan en 'La fe de Cuto', en una edición especial.

Ahí empezó su historia

L: Jugamos juntos 75. Yo era 77, pero el profe Gallardo me jalaba para jugar.

J: La historia es muy diferente... yo era todo grandazo pero no me ponían, a mí el profe me puso en la categoría... antes no te daban buzo, si es que te daban ropa, su shortcito, tu polo y tus medias de lana... a mí me tenían ahí pero el entrenador que estaba no me hacía jugar... cómo eran Cristal, la U, Cantolao, ganaban 15-0, aunque sea me hubieran puesto un ratito. Dos años no me puso ni un minuto hasta que sacan a este señor y llegó otro entrenador y desde ahí empecé a jugar.

L: Yo desde que llegué jugué.

Jahir, tú debutas en primera en Cristal y luego te vas Unión Huaral

J: No. Estábamos concentrados en Las Palmas, con la selección, la sub 20. Recién habíamos llegado de Colombia con Cristal y apenas llegamos quise ver a mi enamorada pero nos mandaron a concentrar en Las Palmas. Ya no podía más y no sé por qué llegó el gerente y nos sacaron a mí, a Dulanto y a Martín. Nos dijeron ‘mañana jugamos contra Defensor en Matute. Hay que ir a la concentración, cada uno en su equipo. Me dijeron ‘tú, vas a salir en Cristal, pero si no juegas te vas prestado a Defensor’. Los otros dos fueron a Defensor. Al día siguiente fue mi debut entonces yo estaba en el primer equipo pero habían seis y los seis eran seleccionados, era muy difícil que juegue. Hacen un convencio, Cristal con Huaral, que les da los jugadores, el campo, todo, ellos solo ponían el nombre. Vinieron cuatro jugadores, César Romano, Toronjo Paredes, mi tío Mingo y Pereira creo. Con mi tío Mingo tengo una anécdota. Estábamos en Huaral, nosotros solo íbamos allá para jugar. Mingo estaba en la banca y la gente empieza a gritar ‘¡Qué entre Mingo!’. Todo el estadio lo reclamó hasta que Gallardo lo puso. Entró a jugar y en la primera falló un gol y el mismo que había empezado a reclamarlo le gritó ‘¡Saquen a ese negro conche...!’.

Leao, tú debutas en Cristal y te quedas hasta el 2001

L: Sí, yo debuto en Cristal porque estaba en la Libertadores que quedó en segundo lugar, 97. El equipo estaba preparándose en Cusco para jugar contra Bolívar. En el equipo titular quedó Ñol, fue él único. Ganamos 1-0, fue un buen debut para mí y luego me toca jugar con Alianza, ahí sí fue bravo. Ya había terminado la Libertadores, yo no jugué más, pasaron dos meses y ya habían problemas con Markarián. Llegamos al Nacional y Alianza tenía un punto menos que Cristal. Viene Mendaña y me dice, ‘pasa, vas a tapar’, yo no sabía nada pero se había lesionado Valerio calentando. Yo estaba asustado al mango, perdimos 3-2, me comí dos goles, uno de Marquiño y nos ganaron. Luego lo sacan a Markarián esa semana. Yo debuto oficialmente ese año, en el 97, y me voy en 2001. Yo venía de titular bien, pero llegó Miranda y deciden prestarme a Sullana, ahí comencé a tomar conciencia de ser titular de un equipo, ahí me sentí más responsable del puesto. Me voy prestado y al siguiente año me fue muy bien, pensé que me iban a llevar de vuelta a Cristal pero sale el Loco Delgado. Me quedé en Sullana un año más y 2004 paso a Alianza.

¿Cómo se da tu llegada a Alianza?

L: Mi representante era Antonio García. Él sabía de mi hinchaje por Alianza y yo estaba arreglando con la U de Sullana. Ese mismo día me llama Antonio con una posibilidad de ir a Alianza. Así me fui, fue algo de último momento. En Alianza todo el mundo me odiaba, me relacionaban con Cristal. Ganamos la final 2003 y el segundo partido oficial fue contra Sao Paulo, en La Libertadores en Lima, perdimos 2-1. Salí y toda la tribuna sur me mentaba la madre y no me había comido gol, toda la tribuna sur me mentaba la madre, eso lo logré cambiar a través de la Apertura. Nos fue muy bien, le ganamos a Cristal, a la U y campeonamos. Ahí recién empezó a cambiar la situación, pero fue difícil para mí, me costó.

Leao Butrón aplaude el momento de Alianza pero dice que falta mucho por jugar
Leao Butrón aplaude el momento de Alianza pero dice que falta mucho por jugar

Jahir, te vas a Sullana y te encuentras a Tano

J: Eso fue en el 96. El 94 y 95 estaba en el primer equipo pero nos prestan a Huaral, subimos y al año siguiente hacen lo mismo con Guardia Republicana y volvemos a subir. Al siguiente año quisieron prestarme de nuevo y dije no. Justo había habido una convocatoria para la sub23 y estaba convocado. El entrenador era Freddy Ternero y él me recomienda a Sullana. Estaba un uruguayo de entrenador, duró poco y llega el Tano Bartorli, cómo te ibas a molestar con él se parecía el Papa. Jugamos con Cristal y perdemos 2-1. Era chibolo y no tenía la mente sucia ni ninguna mala intención, no tenía malicia, no pensaba que se arreglaban partidos y termina el partido, voy a saludar a mis amigos y al día siguiente dicen ‘este se ha echado’... tuve que regresar a Cristal. Me quedé como cuatro meses sin jugar.

Al año siguiente arreglo con Vigo, que también me quería prestar pero no quise. Bien bacán con Vigo, lo sacan al técnico y llega el Tano Bartorli y dije ‘ya me cagué’. Nos mandó a correr y de arranque fui a hablar con él, le dije ‘solo le quiero decir que lo del año pasado lo tomo como una mala experiencia pero ya pasó, a mí me sumo, yo le quiero decir que yo me debo al Alcides Vigo y no tengo nada con Cristal’. De ahí me ponía siempre. Jugamos en Chimbote con Pesquero, Claudio Pizarro se pone sabroso... yo me tiro, los dos caemos y yo de maleado lo pateé y me estiré la espalda, me cambian. Perdemos ese partido y cuando llegamos acá, le cuestionan al Tano por qué me había sacado. El Tano siempre se quería pelear, los mando a la m... y renunció. Me puso en todos los partidos y se la jugó por mí siempre.

Como futbolista, Jahir Butrón jugó por Alianza Atlético en 1996, 2001, 2003 y 2004. (Foto: Enrique Cúneo / Archivo El Comercio)
Como futbolista, Jahir Butrón jugó por Alianza Atlético en 1996, 2001, 2003 y 2004. (Foto: Enrique Cúneo / Archivo El Comercio)

¿Qué te acuerdas cuando llega Eduardo?

J: El hombre siempre fue perfil bajo, chambeaba y chambeaba y todo era gol. Una vez, en un partido nos hacen un gol en la marca de él, viene quejándose que falló pero ahí nomás hace gol y dijo ‘ya no debo nada’, luego hizo otro gol. Tremenda persona.

L: Yo lo sufrí. Me hizo goles todos los partidos. Él estaba en la U pero estaba muy bien.

Jahir, en el 2001, vuelves a Sullana y eres convocado a la selección mayor

J: El 2000 hicimos un buen año con Mosquera en Huanca, ya no era Pesquero, estuvimos a punto de clasificar a una Copa Libertadores. El siguiente año me voy a Sullana, juego un partido y terminando me convoca Julio César pero piña... jugamos contra Estudiantes de Medicina, en la última jugada, yo salto y me estaba marcando Cominguez, me dio un rodillazo y me rompió el músculo. Yo de terco seguí entrenando, no sentía el dolor... llegué a Lima, me sacaron una resonancia y ya. Eran unos partidos en Miami y de ahí venías y quedabas concentrado para jugar con Chile la Eliminatoria. Mi hermano también estaba.

L: De ahí nunca más me convocó Julio César hasta el 2007, Copa América de Venezuela, ahí sí me convocó.

J: Ese año fue malísimo, yo seguía entrenando pero con el músculo roto hasta que en un momento se me rompió totalmente, paré, me recupero como a los tres meses y en un entrenamiento salto y se me incrustal un toperol en el talón. Me recuperé, salto en otra y me caigo y me da tendinitis en la rodilla. Me recuperé, jugamos con Melgar, salimos de Piura, llegamos a Lima, era verano... yo estaba con mi sobrino Carlos Zegarra y le digo ‘está haciendo frío’, me dio faringuitis, 41 de fiebre, no pude viajar.

Jair, luego de estar en Huanca regresas a Alianza Atlético de Sullana en el 2003

J: Nos fue espectacular. Yo me quedo en Sullana, mi hermano se va a Alianza. y me llama Freddy Ternero a decirme ‘¿quieres ser campeón internacional?”, él ya había campeonado la Sudamericana e iban a jugar la Recopa y quería que yo vaya. Le dije a Lander y no quiso, me subió el sueldo pero yo no quería la plata, quería la gloria. Me quedé, Lander se portó bien conmigo esos dos años y el 2005 ya me voy a Cienciano. Lander y Juvenal son amigos, pero Juvenal es rata, mosca, siempre me decía ‘vas a venir al club’ y siempre coincidíamos en el aeropuerto y me daba una luca o dos lucas gringas, al final fueron como 12 lucas. Me tocó jugar en Sullana y Lander se entera del interés y no quiso que juegue. En el estadio estaba Juvenal al costado de Lander, Juvenal me ve y me dice ‘hijo, bienvenido al Cusco’, mosca pues.

Leao, tú te vas a Alianza en 2004

L: Sí. La pasamos mal económicamente en 2005 y luego aparece San Martín, me voy a San Martín 7 años, tres títulos. Pero yo me voy a Alianza y Alianza sale campeón en 2006. Estoy 7 años en San Martín, luego viene la huelga y me botaron, bueno me dijeron que no querían seguir conmigo y me voy a Melgar, dos años, luego vuelvo a Alianza en 2015 para quedarme hasta terminar mi carrera. A mí me costó mucho pasar de Alianza a San Martín, seis meses me costó, San Martín era frío, había poca gente en el estadio. Una vez estábamos jugando y mi hija tenía 3 años y en el Monumental, donde bajan los ómnibus, hay un espacio grande, te puedes caer. En pleno partido le silvaba a mi esposa para que mirara a la bebé que se iba caer. No había nadie en el estadio. Me costó pero luego me acostumbré y la pasé muy bien, excepto ese último año que fue la huelga. Nosotros también paramos, un mes nos sacaron, cada uno entrenaba por su cuenta en la cancha que podíamos. Al mes nos dicen para regresar y a los dos o tres días jugamos contra Cristal y le ganamos 2-1.

En 2008 compartí camerino con Jahir, en Juan Aurich

J: Empezamos bien pero vivíamos en uno de los mejores hoteles, ahí hacíamos nuestras parrillas y de un momento a otro todo cayó en picada.

¿Cuando se enfrentaban nunca te hizo un gol?

L: Ni en sus sueños me ha hecho un gol.

J: Le iba hacer el gol, cuando estaba en Cienciano y él en Alianza, iba salir el gol del siglo, no sé por qué retrocede y me la saca...

Leao y Jahir Butrón se confiesan en 'La fe de Cuto', en una edición especial.
Leao y Jahir Butrón se confiesan en 'La fe de Cuto', en una edición especial.

¿Nunca hacían apuestas?

L: No, se hubiera quedado misio

Leao, qué amigo recuerdas más en Melgar

L: Tuve dos temporadas en Melgar, para mí, después de Alianza es Melgar, me hice hincha. En 2013 que llegué había una administración que cumplió pero... nosotros nos cambiábamos en una combi y algunos afuera, al final te acostumbras... hasta que llegó Reynoso y cambia todo. Arregló los vestuarios, los estadios.

Jahir, Luego te vas al CNI de Iquitos

J: Una decisión equivocada. Nosotros en 2009 habíamos hecho un grupo espectacular en el Aurich, y ese grupo supuestamente iba continuar en Huánuco. Carlos me decía, ‘pero ven’. Yo estaba fastiado con Franco por lo que me había hecho y me voy. Eran puros chibolos y los únicos grandes éramos Comninguez, Chicho Salas, Villanueva y yo. Un día íbamos a jugar con un grande. Entrenamos a las 6 de la mañana por el calor y los chibolos nos dijeron que no les habían pagado, a nosotros sí, entonces decidimos parar. El presidente decía que ya les habían pagado y nos dijo que nos vayamos. En la noche un mototaxista me llama y me dice que estaban concentrando, todos los chibolos estaban concentrando, jugaron. El presidente Iván Vásquez tenía una radio y un canal de tv allá y comenzó a decir cuánto ganábamos los grandes y que con eso pagaba a 10 chicos, la gente nos odió, no podíamos salir a la calle. Nos empieza a citar para entrenar a las 12 del día. Íbamos con Policía para que certifique y no había nadie ni que nos dé ropa, no entrenábamos. Una vez nos citó a las 8 de la noche con la luz apagada. Yo todo domcumentaba. Salía a la calle y me gritaban ‘ladrón’. Mandé todos los documentos a la agremiación, mandé una carta que no me contestó y me di por despedido por hostigamiento laboral. Me regresé acá. Yo le hice un juicio y le gané buen billete, me pagó en una.

Tu carrera termina en Coopsol

J: Claro, yo en 2010 a medio año me voy a Cienciano y 2012 me voy al Boys. El Boys había contratado a mucha gente, estuve ahí con la bala Moisela. Estaba Techera. El primer mes, hubo la huelga y cinco para afuera. Creo que se habían pasado en el presupuesto. Yo ya no quería jugar, ya estaba estudiando para técnico. Me llama Arrelucea que estaba en Coopsol pero yo ya no quería jugar. Al final fui, me convenció y jugué. Ahí decido retirarme porque ya me dolía todo. Ese año termino de estudiar y ahí nomás ya estaba dirigiendo la agremiación. Me fue bien y en enero me llama Sport Huancayo para jugar ese año, en 2013, pero siempre he pensando, plata no me sobraba, pero siempre he pensando en que uno tiene que dejar el fútbol, no que el fútbol te deje.

Leao Butrón es el actual gerente de Academias y Franquicias de Alianza Lima. (Foto: Alianza Lima)
Leao Butrón es el actual gerente de Academias y Franquicias de Alianza Lima. (Foto: Alianza Lima)

Leao, tú cierras tu carrera en Alianza Lima

L: Sí, yo me quería retirar en el 2019 pero Alianza me insitía para quedarme. En 2020 uso mis redes y pongo que me voy, que era mi último año, pero 2020 pasó todo lo que pasó en Alianza. Comenzamos con un equipazo, luego se van como 8 jugadores, Alianza no renueva, nos faltaban jugadores. Yo pensé en retirarme pero si Alianza me decía para jugar, jugaba. Dejé de jugar, no extraño nada del fútbol, pocas veces voy al estadio, sí me gusta ver los partidos en tv, pero será que dejé el fútbol cuando ya estaba un poco cansado y encima ese año la presión fue fuerte. Gracias a Dios que Alianza no bajó si no tuviera que haber ido a Segunda. Creo que en la parte deportiva hicimos todo mal, no se pueden ir ocho jugadores titulares y no renovar, a quién se le ocurre, no sé qué pasó, hicimos todos los méritos para que nos vaya mal. La informalidad del fútbol peruano hizo que Alianza se quedara.

La Federación en ese momento fue juez y parte, pagando salarios a equipos que luchaban contra nosotros, no puede ser. Mucha gente se pregunta por qué Alianza fue al TAS, porque reclamó lo que estaba pasando en el fútbol peruano. Nos salvó eso. Me acuerdo este 17 de marzo, llamé a Julio García, uno de los abogados que vio eso, y le agredecí porque más allá de lo que pasó en 2020, si Alianza jugaba al siguiente año se quedaba toda la vida esa vaina. Y encima Alianza campeona 2021 y 2022, eso fue como un regalo de Dios, sino imagínate, hubiera sido un dolor interminable.

A ti te convoca también Ricardo Gareca. Fue todo un tema cuando dijeron que tenías que entrar

L: Sí, mira, no hay que hacer drama. En ese momento, yo cuando jugaba era diplomático... la diferencia era obvia (con Gallese) pero entiendo al profesor Gareca, a Bonillo y a Bocha porque no solo es una consideración deportiva, hay otras consideraciones, grupo, cómo le estaba yendo... pero si era solo la parte futbolística era de robo que tenía que estar ahí. Pero contento porque el profesor Gareca me llamó, mi primera convocatoria fue 97 y la última fue 2017, 20 años he estado ahí. Y más allá que no fui al mundial, estuve en la recta final que nos llevó al mundial. Contento por eso y triste porque no fui a un mundial y creo que sí debería haber ido, pero bueno, así es el fútbol. Por más que no me guste la decisión de Gareca, no voy a pensar que es mal entrenador, es excelente entrenador. A mí Autori me sacó de Cristal y para mí es un gran entrenador, me sacó porque no estaba en sus planes. Lo que más me dolió fueron los premiazos, esa candela...

TE PUEDE INTERESAR

Contenido sugerido

Contenido GEC